Monasterio Cisterciense Santa María la Real de Villamayor de los Montes -Burgos, España-

Lugar para encontrarse con Dios

VISITA NUESTRO CLAUSTRO E IGLESIA

Una hermana guía la visita
Fin de semana y festivos de 11:00h a 13:00h y de 16:15h a 17:45h

Entre semana acompañamos grupos

con cita previa llamando al 947189001



¡Acércate a nuestra raíces!- Roberto, Alberico y Esteban

Santidad de los que conforman el carisma cisterciense

FOTO

Ponemos en vuestro conocimiento la obra de Dios en hombres y mujeres que contribuyeron a la consolidación de lo que hoy conocemos por carisma cisterciense.

FOTOA modo de entrevista, se presenta el trío que fundó la Orden del Cister

A modo de entrevista, se presenta el trío que fundó la Orden del Cister

Una Cita con los Santos

Con motivo de la fundación de la Orden Cisterciense, tenemos como invitados a Tres mojes cistercienses, fundadores de dicha Orden. Conocidos muy cariñosamente por algunos como los TRES MONJES REBELDES. Sus nombres son Roberto, Alberico y Esteban Harding.

Periodista:        He querido comenzar esta entrevista, preguntándole a cada uno ¿cómo se inició la llamada de Dios en su Vida?, es decir, su vocación… y así motivar a aquellos jóvenes que sientan alguna inquietud en su corazón. Empezamos contigo Roberto.

Roberto:           Gracias, vengo de una familia acomodada, mi Padre era caballero de Champagne, él había soñado ardientemente que su hijo cabalgase a su lado, armado como él; como él fuerte y bravo, con su propia e indomable bravura. Esto era lo que me ofrecía la vida, pero mi corazón ardía por la más alta hidalguía en este mundo. ¡La hidalguía de ser caballero de Dios! Fui educado por los monjes y aprendí de ellos lo que es la alta hidalguía. Hubo tres años de escasez y las puertas de Saint Pierre de la Celle se vio abarrotada de hambrientos. Y veía cómo ninguno de los hambrientos se alejaba con las manos vacías, porque los monjes sufrieron hambre para saciar a esa gente. Fue entonces cuando comencé a comprender que no era necesario llevar cota de malla o enarbolar el hacha de combate para ser valiente. Supe que hay una hidalguía más alta que la caballería misma. Se lo confesé a mi padre y a mi madre, fue un poco duro para ellos, pero ya no me sentía como un niño. Dios me dio el valor para decir la verdad y pude ver que en realidad yo era fuerte por la gracia de Dios. Un día mi padre se acercó y colocando su mano en mi hombro me dijo con dulzura:   «Hijo mío, tu madre me ha convencido, puedes ir a Saint Pierre, pero considera tu entrada a la vida religiosa como si desenvainaras tu espada por la causa de Dios. ¡Nunca envaines esta espada!».

 Periodista:        ¡Que apasionante!... ya comprendo porque te llaman Roberto el rebelde, pareces fuego… y tú, Alberico ¿Cómo empezó tu seguimiento?

Alberico:           Comencé mi camino cuando supe de hombres que dejaron todo para ir a vivir en el bosque de Colan como ermitaños. Viendo que eran guerreros, nobles y soldados ¡como lo era yo! Me motivó a dejar de buscar mi gloria y buscar la Gloria de Dios, lo dejé todo y me fui con ellos… para muchos he sido ¡un radical! Todo por el TODO.

 Periodista:        No hay duda de eso… muy rápido en responder… ahora tú Esteban, ¿eres inglés?

 Esteban Harding:      Sí, vengo de Inglaterra, cuando niño estme enviaron a estudiar con los Benedictinos de Sherborne, al finalizar el curso me fui a las Islas de los Santos y de los Sabios donde terminé en París. Esta era mi pasión, el estudio. Pero resulta que después de un tiempo sentía en mí una inquietud, mi vida me pareció vacía y mi búsqueda de sabiduría, vana. Decidí buscar la Verdad, vestí el hábito de peregrino y marché a Roma. Me encontré con otro joven, muy buen amigo, llamado Pedro, ahora benedictino de Cluny. Juntos hicimos nuestra jornada. Pero al llegar a Borgoña nos separamos. Pedro siguió su camino a Cluny, era su sueño, mientras que yo atraído por los comentarios que había escuchado sobre la santidad de Roberto y sus rebeldes, quise unirme a ellos.

Periodista:         Ahora, aprovechando lo que ha dicho Esteban sobre lo que escuchó de la santidad de Roberto y sus monjes, Roberto ¿cómo comenzó tu proceso de búsqueda “dentro de tu llamado”?

Roberto:           Cristo es mi única respuesta… por la Caridad de Cristo te resumiré un poco los acontecimientos…Después de estar en Saint Pierre como benedictino, en mi alma existía un ansia por una práctica más estricta de la Regla de San Benito…y la obediencia era el único camino para contener tales ansias. A la edad de 27 años me designaron Prior de la comunidad, años más tarde fui designado Abad de Saint Michele de Tornerre, pero mi alma aun ardía, pensé que con esa oportunidad podría encender a mis hermanos de dicha comunidad, en una entrega más total y apasionante por vivir la Regla en su autenticidad. Pero mis hermanos aun no estaban listos, a los dos años como Abad renuncié y entendí que los hombres no pueden ser acosados a la santidad, esa fue la lección que me enseñaron los brazos extendidos del crucificado. Volví a Saint Pierre, no renunciaba a mis ideales sino a la Abadía. Luego a los 7 años me pidió la comunidad de Saint Ayoul como su Abad. Para algunos era volver a fracasar pero, si fuera así, el fracaso me hizo poner de rodillas frente a este Rey Crucificado: ¡El Cristianismo no es un culto que lleve al éxito! Esta es la ciencia de la Cruz, por eso no tenía miedo a volver a intentarlo, no habían pasado aún cuatro meses cuando recibí una carta del Papa Alejandro II, donde me ordenaba que me hiciera cargo de los ermitaños de Colan.

Periodista:         Perdona que te interrumpa, ahí conociste a ALBERICO ¿verdad?

Roberto:           Sí, brillaba con su sonrisa, lo nombré Prior… En Colan no había nada que reformar, lo único que debía hacer era cumplir el deseo de la comunidad, y el mío propio, darles la Regla de San Benito en todo su simplicidad. En un año la comunidad se duplicó, pero a causa del sitio tan insalubre que era Colan, nos fuimos a los bosques de Molesmes. Con la ayuda del Obispo de Troyes la comunidad comenzó a prosperar en número y bienes.

Periodista:         Uno de los tres me puede responder ¿Por qué el Císter?

albAlberico:           En el año 1098... Nació el Císter, movido de ansias de verdad, anhelos de pobreza y sencillez, gran Amor a Dios, donde el silencio se va haciendo Caridad…siempre con Espíritu fiel y amor a la Regla de San Benito.

Periodista:        Bueno querida teleaudiencia, me despido de todos ustedes, en compañía de estos inquietos buscadores de la vida, que está escondida en la quietud de Dios; pregón y buena nueva que fascina a todo el que por la verdad camina, por una soledad que no es vacío, sino presencia oculta y plenitud que nos inunda. Jesús aún vive y actúa entre nosotros. Antes de irnos, Rebeldes ¿No quieren dar una palabra de salvación?

Roberto: «Cuando se ama no hay trabajo o, si hay trabajo este se ama».

Alberico:«El amor debe ser ardiente, eterno, quemante y penitencial».

Esteban Harding:«Dios desea contemplar rostros levantados hacia su Hijo».


Más información en la web:

- Solemnidad de Nuestros Padres Fundadores


« ¡Acércate a nuestra raíces!- beato Cipriano Tansi ¡Acércate a nuestra raíces!- memoria de santa Escolástica »

Monasterio Cisterciense
Santa María la Real


09339 Villamayor de los Montes
Burgos - España
Telf. 947 18 90 01
info@monasteriodevillamayor.com
Recibe nuestro newsletter